viernes, 19 de diciembre de 2014

Vuelves en cada canción.

Te resististe como nadie, no querías marcharte, no tuvimos un adiós como dios manda, volvías en los peores momentos, volvías tras cada fallo, cuando más te necesitaba, volvías. Aun que tu no lo supieras, estabas ahí, ocupabas parte de mi, te marchaste de mi vida y aún así decidiste quedarte en mi corazón, dolías, y tanto que sí, dolías y mucho, doliste como pocos, como nadie, me destrozaste, y me costo, años, no sabía cómo dejarte, no quería, y volvías. Mi fuerza y mi debilidad, mi persona especial, se iban, pero tu volvías en cada canción, en cualquier recuerdo, volvías y me sacabas una sonrisa entre tanta lágrima, y me dabas fuerzas cuando fuiste tú quién me arrastro por el suelo, y joder, maldita idiota que te recibía de nuevo con los brazos abiertos, y ahí seguías, sin dejarme avanzar, atada a ti, nos unía un lazo invisible, y yo solo quería lo mejor para ti, y me olvide de mí, me olvide de quererme por quererte de más, quién pudiera dar marcha atrás en el tiempo, brindaré por lo que queda por hacer, me equivoqué, no eras tú, pero no podrás decir que no lo intente, por ti y por mí, pero se acabó, y a pesar de todo, de vez en cuando vuelves y no me importa que te quedes pero solo por un tiempo, porque ya tuve suficiente, echaremos unas risas, seguro, pero al final del día vete.